Mindfulness es una práctica de atención plena que se enfoca en vivir en el momento presente, en lugar de preocuparse por el pasado o el futuro. Esta práctica proviene de la meditación budista y se ha convertido en una técnica popular utilizada para reducir el estrés, mejorar la concentración y aumentar la felicidad.
Para alguien que se inicia en mindfulness, es importante saber que la práctica consiste en enfocar la atención en las sensaciones del cuerpo y la respiración, y en observar los pensamientos y emociones sin juzgarlos. Al hacerlo, se aprende a aceptar y dejar ir los pensamientos y emociones negativos, y a centrarse en el momento presente.
La práctica de mindfulness puede llevarse a cabo de varias maneras, incluyendo meditación, yoga, caminatas en la naturaleza, ejercicios de respiración y más. La clave es encontrar una técnica que se adapte a tus necesidades y gustos personales.
Día 1: Establecer una intención
El primer día de la guía, es importante establecer una intención para la práctica de meditación. ¿Por qué deseas meditar? ¿Qué te gustaría lograr? Toma unos minutos para reflexionar y escribir una intención que te ayude a mantenerte motivado y enfocado durante toda la práctica.
Consejos:
- Encuentra un lugar tranquilo y sin distracciones para meditar.
- Siéntate en una posición cómoda con la columna vertebral recta.
- Enfócate en tu respiración, inhalando profundamente y exhalando lentamente.
Día 2: Practicar la atención plena en la respiración
El segundo día, la práctica se centrará en la atención plena en la respiración. Esto implica prestar atención a las sensaciones de la respiración, sin juzgarlas ni intentar cambiarlas.
Consejos:
- Encuentra una postura cómoda y estable.
- Cierra los ojos y enfoca tu atención en la sensación de la respiración en tu cuerpo.
- Si tu mente se distrae, simplemente vuelve a enfocar tu atención en la respiración.
Día 3: Escanear corporal
El tercer día, la práctica se centrará en escanear tu cuerpo. Esto implica prestar atención a las diferentes partes del cuerpo y notar cualquier tensión, dolor o incomodidad.
Consejos:
- Encuentra una postura cómoda y estable.
- Cierra los ojos y enfoca tu atención en la sensación de cada parte de tu cuerpo, comenzando por la cabeza y bajando hacia los pies.
- Si notas alguna tensión o incomodidad, respira profundamente y relaja la parte del cuerpo.
Día 4: Observación de pensamientos
El cuarto día, la práctica se centrará en la observación de los pensamientos. Esto implica prestar atención a los pensamientos que surgen en la mente, sin juzgarlos ni intentar cambiarlos.
Consejos:
- Encuentra una postura cómoda y estable.
- Cierra los ojos y enfoca tu atención en tu respiración.
- Observa los pensamientos que surgen en tu mente sin juzgarlos ni intentar cambiarlos. Simplemente obsérvalos y deja que pasen.
Día 5: Observación de emociones
El quinto día, la práctica se centrará en la observación de las emociones. Esto implica prestar atención a las emociones que surgen en el cuerpo, sin juzgarlas ni intentar cambiarlas.
Consejos:
- Encuentra una postura cómoda y estable.
- Cierra los ojos y enfoca tu atención en la sensación de tu respiración.
- Observa las emociones que surgen en tu cuerpo sin juzgarlas ni intentar cambiarlas. Simplemente obsérvalas y deja que pasen.
Día 6: Práctica de compasión
El sexto día, la práctica se centrará en la compasión. Esto implica cultivar un sentimiento de amor y compasión hacia uno mismo y hacia los demás.
Consejos:
- Encuentra una postura cómoda y estable.
- Cierra los ojos y enfoca tu atención en la sensación de tu cuerpo
Marcel Melhem es un empresario con más de 25 años en distintos sectores, hoy focalizado en inversiones en el sector de Real Estate, tanto en Argentina como en Uruguay. Amante del Surf, la meditación, Coach Ontológico Profesional y escribe en reporteasia.com y surfyvida.com.ar
